Martin Ganón: “Mi propósito como Chief Products Officer es ayudar a mi equipo a desarrollar su máximo potencial”
Mientras Martin Ganón estudiaba Ingeniería de Sistemas, ya sabía que no quería pasar toda su carrera frente a una pantalla escribiendo código. Se identificaba al mismo tiempo como una persona creativa, con interés por el liderazgo y ganas de ayudar a otros, pero no fue sino hasta mitad de sus estudios que conoció el proyecto Zeppelin Labs, una startup uruguaya que le ha permitido darle un rumbo diferente a su carrera profesional.
Hoy en día, Zeppelin Labs tiene 7 años en funcionamiento y Martin ha pasado por diferentes áreas y proyectos dentro de la organización durante 6 años, hasta que en 2021 asumió el cargo de Chief Products Officer. En paralelo a su nuevo rol, Martin comenzó a hacer el Master in Management (MiM) en UCU Business School, y en esta oportunidad conversamos con él como Alumni para conocer las tendencias en creación de productos y las habilidades necesarias para enfrentar los desafíos propios de un líder de equipo de esta área.
¿Cómo has visto evolucionar a Zeppelin Labs hasta ahora?
Hemos experimentado un montón. Empezamos sin tener siquiera una herramienta donde anotar tareas, nos cantábamos las tareas unos a otros porque éramos apenas cinco o seis personas. Hoy en día tenemos varios equipos con objetivos claves que se traducen en resultados, experimentado y canalizando impacto. Nuestra esencia siempre fue aprender juntos mediante ensayo y error.
Por otro lado, hace más o menos 1 año que nos enfocamos en un nicho de mercado, antes hacíamos un poco de todo. Hoy nos concentramos en herramientas creativas para la web, porque hemos descubierto que ahí es donde nuestros skills se combinan mejor y aportan valor. Hace unos meses lanzamos TypeCraft, una aplicación para Canva, que estuvo nominada entre las 3 mejores aplicaciones de la plataforma en 2023, y para nosotros es un hito del que estamos muy orgullosos dado todo el camino recorrido y el trabajo duro para llegar allí.
En cuanto al relacionamiento con los clientes, ¿cuál es el criterio que manejan para definir con cuál cliente o proyecto trabajar?
Algo que llama mucho la atención cuando un potencial cliente nos mira es “bueno, tienen 7 años en el rubro, ¿por qué no son 100 o 200 personas?” En tecnología, las empresas tienden a apostar al alto volumen de personas y de clientes, pero nosotros nunca hemos jugado a sumar gente para eso, y tratamos de hacerlo un diferencial porque nos permite enfocarnos en el relacionamiento a largo plazo con los clientes, a los que llamamos partners.
Además, somos muy estrictos al momento de tomar un nuevo cliente. Nuestra prioridad es que haya un trato muy bueno para con el equipo, que vengan abiertos a no tener una relación cliente – proveedor, sino que queremos entender bien el negocio y el porqué del producto que buscan, para poder hacer bien nuestro trabajo. También apostamos a vincularnos a largo plazo con nuestros partners, a seguir ayudándolos a resolver sus problemas de negocio y a capitalizar oportunidades, cuidando nuestro equipo y negocio.
¿Cuáles son las tendencias en desarrollo de producto que quisieran adoptar este año?
Hay mucho camino por recorrer en la interacción que tienen los usuarios con estos nuevos productos que incorporan inteligencia artificial. O sea, venimos de largas décadas en las que le decíamos a la máquina “1+1”, y ella nos decía “2”, pero ahora la máquina también podría decir “esto es una operación de adición”, o generar una imagen con la respuesta, por ejemplo. Entonces se trata de entender las expectativas del usuario y cómo hacer que la experiencia sea amigable y útil, aún sin tener demasiado dominio de la calidad final de respuestas que pueden venir. Es un tema muy complejo que involucra psicología del usuario, tecnología, diseño, y creo que se van a tener que unir mucho más distintas disciplinas para entender realmente cómo funciona.
Lo otro, es trabajar más que nunca la empatía con los usuarios. Buscar que los productos nos ayuden también a entender necesidades de los usuarios y modificarlos en función de eso, porque a medida que el usuario aprende a usar una herramienta o dispositivo, eso modifica la expectativa del usuario y espera que el producto evolucione en consecuencia. La vara es cada vez más alta.
Como Chief Products Officer, ¿cuáles crees que son 3 habilidades claves para enfrentar los desafíos de tu rol?
Creo que la habilidad número uno es la adaptabilidad. Todos los días hay que releer el contexto y adaptarse aunque sea un poquito, porque todo cambia todos los días. En segundo lugar, las habilidades de liderazgo son muy importantes. Mi rol implica dar dirección, coordinar y ayudar al equipo a conectar necesidades con soluciones innovadoras, entonces para mí, el liderazgo se traduce en generar cercanía con el equipo para ayudarlos, empoderarlos y formarlos, poque los que desarrollan los productos en sí son ellos. La tercera habilidad clave para mí es el aprendizaje continuo, necesito aprender nuevas cosas todo el tiempo, familiarizarme con lo que es nuevo y saber discernir entre lo que es tendencia y lo que es realmente un cambio.
¿Cómo llegaste al Master in Management (MiM)? ¿Qué te motivó a hacerlo?
Cuando me recibí de ingeniero en 2021, todavía no era Chief Products Officer, pero sí estaba liderando equipos y tenía ganas de buscar un nuevo desafío. En su momento, investigué y descubrí el concepto del MiM en el extranjero, y cuando supe que se ofrecía acá dije “esto es lo que yo quería”.
Lo que más me gustó de la propuesta fue el enfoque de aprendizaje: los bootcamps, las distintas perspectivas desde distintas áreas, las distintas profesiones de los compañeros. Eso era algo que a mí tenía mucho valor, porque yo estoy rodeado de ingenieros y me preguntaba ¿qué otras miradas me estoy perdiendo? Yo quería justamente un enfoque práctico y compartir vivencias con otros compañeros, porque tenía poca experiencia laboral en el momento y quería aprender de otros.
Después, ya sabía que quería mejorar mis habilidades de liderazgo. Justo cuando arrancó el MiM, yo pasé a este cargo, entonces me vino como anillo al dedo porque había cosas que veía en clase y ya las estaba enfrentando en el trabajo, así que lograba entender mejor y adquirir herramientas.
¿Cómo influyó tu paso por el MiM en el desempeño de tu rol y en el intercambio con tu equipo?
Creo que el paso por el MiM me cambió de muchas maneras. Me sirvió para desarrollar más el relacionamiento con el equipo, darles otras herramientas que antes no podía darles. También me dio nuevas formas de encarar temas que contribuyen a desafiar al equipo y a ayudarles a crecer.
Después, creo que dos de las áreas en las que más me aportó el máster, que no las tuve en mi formación de grado, fueron las finanzas de la empresa y la visión interdisciplinaria para hacer preguntas desde distintos puntos de vista y enriquecer las conversaciones con el equipo a partir de eso.
Sin dudas el mayor activo que me llevé fueron grandes amigos y colegas con quienes generé una red de apoyo y confianza muy buena que sé que perdurará en el tiempo para ayudarme en lo que venga.
En UCU Business School, el propósito es un pilar fundamental para el liderazgo, ¿cuál es el tuyo?
Mi propósito es algo que sigo descubriendo, pero sé que viene por el lado de ayudar a construir equipos donde las personas se sientan cómodas trabajando y tengan un alto potencial de desarrollo. En este caso, lo hago enfocado desde la parte de producto y en esta industria en la que yo trabajo, pero lo veo también más allá de eso. Me gusta mucho ayudar a otros a desarrollar y a sacar ese potencial que tienen adentro, y que a veces no se dan cuenta de que está ahí.
Creo que, además, mi propósito conecta mucho con el de Zeppelin y eso explica por qué estoy en este lugar y no en otro. Si la idea es crear más allá de lo que nos imaginamos, me parece que eso se traduce en darles a los miembros de nuestros equipos las herramientas y las oportunidades para sacar el máximo de su potencial y conectar con lo que hacen.
¿Qué perfiles crees que se benefician más de hacer un MiM?
En mi opinión, el MiM es un máster diferente a lo que uno está acostumbrado a encontrar. Por eso, creo que puede ser muy útil para jóvenes con una actitud proactiva, aquellos que tienen la curiosidad y el deseo de seguir creciendo y eventualmente ascender a roles de liderazgo en la industria en la que están. Este tipo de perfiles encuentran en el máster las herramientas y la flexibilidad necesarias para adaptar el programa a su manera y moldear su camino profesional.